lunes, 23 de marzo de 2015

SANTIAGO DE COMPOSTELA

Hola amigos!!

Anda que no nos gusta viajar al quinto pino, conocer otras culturas, edificios que nunca hemos visto, arte diferente, comidas distintas y escuchar idiomas ininteligibles.

Yo soy al primero al que le gusta, y el primero que está deseando irse no ya a otros lugares de Europa, sino que ojalá pudiese coger una mochila, y empaparme de Asia, América, África y Oceanía.

Pero igual que es positivo conocer otros lugares, también es importante recordar que hay pequeños paraísos a la vuelta de la esquina.

En concreto, Galicia está lleno de ellos. Y poco a poco iré "recorriéndolos" con vosotros, empezando con uno de los más conocidos...pero no por ello menos magnífico.

La capital de mi maravillosa tierra, Santiago de Compostela. El lugar a donde nada menos que llegó un apóstol de Cristo desde Judea...y tanto le gustó, que aquí se quedó.
Si yo hubiese tenido que elegir un lugar para quedarme tras caminar tropecientosmil kilómetros, también hubiese elegido Galicia, jejejeje.



El casco histórico de Santiago, declarado patrimonio de la UNESCO en 1985, es de una belleza sin igual. Aunque esté tan cerca, aún me pone la piel de gallina pasear por las calles que parecen no haber cambiado en cientos de años, en dirección a la plaza del Obradoiro, donde se haya una de las catedrales románicas más impresionantes del mundo, contemplar los pazos, las iglesias, las placitas, las antiguas facultades de la ciudad universitaria por excelencia o simplemente, detenerme a tomar un café en los pequeños y encantadores locales que podemos encontrar por doquier, mientras se ve la vida pasar.
A un ritmo distinto al de nuestras ciudades, y que parece casi de otra época.



Evidentemente, Santiago tiene también una parte más moderna, con centros comerciales y ciudad universitaria, y aunque no me centraré en ellos, he de decir que tampoco me disgustan demasiado.

Es evidente que la ciudad es uno de los principales lugares de culto en la Cristiandad, tan solo por detrás de Roma y Jerusalén, y esto se ve reflejado en la cantidad de edificios religiosos que pueblan sus calles, y por supuesto, en la gran cantidad de peregrinos que vienen desde todas las partes del mundo para entrar en la Catedral y rezar ante los restos del Apóstol, o simplemente para vivir nuevas experiencias haciendo un camino que se ha convertido, y con razón, en uno de los principales reclamos turísticos de Galicia.
Qué experiencia tan inigualable supone llegar al bien llamado Monte do Gozo, y ver por fin nuestro destino a nuestros pies.



Ay, Santiaguiño...que cerca estás, y cuanto tiempo llevo sin hacerte una visita. Eso va a cambiar muy pronto, porque es hablar de ti, y empezar a tener ganas de verte!!

- Por qué ir a Santiago?:

Porque es la capital de la tierra más bonita del mundo, la tierra donde el cielo es siempre gris, pero la lluvia es arte. La tierra verde. La tierra de la superstición y la tradición. A miña terra!
Y por los inmensos encantos de una ciudad patrimonio de la humanidad y por la catedral, especialmente el Pórtico de la Gloria, cumbres para mi del arte románico.

Y si queréis llegar a Santiago haciendo el camino (me da igual el francés, el inglés, o el portugués) conoceréis varios lugares que pensabais que solo podían existir en los cuentos. Especialmente si no habíais estado en Galicia antes
Para mi el camino de Santiago, supone una metáfora de la vida, ya que nos enseña que, aunque cueste, aunque toque sufrir, se puede disfrutar el camino tanto como la meta.



- Imprescindibles:

Por supuesto, la plaza del Obradoiro. En ella están la catedral, que merecería capítulo aparte, el Hostal de los Reyes Católicos, obra cumbre del Plateresco, repleto de peregrinos el pasado, y ocupado solo por gente de "pasta" en el presente, el Pazo de Raxoi donde se alojan el ayuntamiento y la Presidencia de la Xunta de Galicia, y el Colegio de San Jerónimo, actual sede del rectorado de la universidad.



Solo por plantarse 10 minutos en este enorme espacio rectangular merece la pena la visita a Santiago.

Pero como decía, la catedral por si misma, aunque estuviese en medio de una plantación de lechugas, merecería muchísimo la pena.

Como decía es la obra cumbre del románico, pero si os parece barroca así, a primera vista, es correcto. No estáis equivocados.
La fachada es del siglo XVIII para proteger la deteriorada fachada medieval, aunque conservando y aprovechando muchos de sus elementos previos.
El interior es magnífico, y no he estado en ninguna construcción románica que me haya hecho sentir tan insignificante.
Recuerdo especialmente cuando colaboré como enfermero en la visita de Drácula a España (perdón, del Papa Benedicto XVI), y en algún momento, durante la preparación del evento y de los lugares que teníamos que ocupar, recuerdo estar sentado dentro de la catedral sumido en una especie de vacío mental, una especie de meditación profunda que nunca había experimentado antes.
Un momento zen, que aún no se ha repetido, y sin duda, producido por el magnífico lugar en el que me encontraba.



Sin embargo, pasear por las calles y plazas adyacentes al Obradoiro, y encontraros con Azabachería, Platerías, mercado de abastos o el monasterio de San Martín Pinario, hará que poquito a poco Galicia os vaya conquistando de esa manera tan gallega: Sin prisa, con esa melancolía y esa sensación de ternura y magia que se queda para siempre en las mentes y en los corazones.

Por último, creo que todo el mundo debería hacer, al menos una vez en la vida, el camino de Santiago. Peregrinar a Santiago es de las experiencias más enriquecedoras que se pueden tener, y os lo dice alguien que lo tuvo que hacer en distintas etapas por motivos de trabajo. Me imagino que hacerlo como Dios manda (literalmente en este caso, jajaja) tiene que ser (me vais a perdonar) la hostia!



- Decepciona algo:

Bueno, lo más probable cuando visites Santiago es que esté lloviendo. En ese caso, los paraguas, y las acumulaciones de gente pueden hacer el viaje un poco más complicado.
Pero esos tonos grises que da la lluvia gallega, también harán que veas el Santiago más auténtico. Porque Galicia es lluvia. Y es tan maravillosa, precisamente por ello.
Y venir a Galicia (especialmente al norte) a buscar sol y playa, es como ir al Caribe a buscar fresquito. Puede pasar, pero cuenta con que no, jejejeje.



La ciudad en si, no decepciona nunca. Y el camino de Santiago, menos aún. Ya sea solo, o en compañía. Ya vengas de muy lejos, o de muy cerca. Del norte, del sur, o del este. Acabes en Santiago o sigas hasta Finisterre. El camino de Santiago es una auténtica maravilla para los sentidos y para el espíritu, que debéis ofreceros a poco que tengáis la oportunidad.


- Cosas pendientes:

En Santiago casi diría que ninguna, pero como decía antes, hacer el camino de Santiago de verdad (no digo desde Roncesvalles, pero si durmiendo en albergues y sintiendo que verdaderamente peregrino) me apetece muchísimo, y está entre mis próximos objetivos.
Me encantó la sensación cuando lo hice de sábado en sábado, y solo desde Melide, asi que estoy deseando que me aporte más de lo que me ya me aportó en ese momento haciéndolo día tras día, y, al menos, desde Pedrafita do Cebreiro.
Seguiremos informando. Si alguien tiene la misma inquietud, que me lo diga, porque igual buscamos momento para hacerlo juntos.



- Comer y beber:

Es Galicia amigos. Comer y beber, de calidad y en abundancia, está garantizado. Mariscos, pescados, carnes, verduras, vinos blancos y la reina de las cervezas, la Estrella Galicia.
No creo que a ninguno de vosotros tenga que explicaros lo que significa venir a mi tierra a saborear la gastronomía.
El mejor marisco del mundo (me voy a quedar con el pulpo y las navajas pero aún no he probado ninguno que no me guste), pescadito increible (y que por fin con 33 años estoy empezando a apreciar, filloas (crepes de alto standing), lacón con grelos, cocidos que alimentarían países pequeños enteros y fruta maravillosa (si bien no tan dulce como la del mediterráneo, las cosas como son).

 

Albariño (el Ribeiro no me gusta tanto), y sobre todo Estrella Galicia. Me da igual en caña, en botella, 1906, red vintage o la negra que han sacado ahora.
Soy un integrista de la Estrella Galicia. Se que siempre digo que hay que disfrutar y empaparse de las costumbres y comidas de otros lugares, pero con una cerveza como ésta, se hace complicado disfrutar de ninguna otra (especialmente en España, con esos engendros llamados Mahou y Cruzcampo).



Eso si, por Dios, no me hagáis como los guiris, que se ponen ciegos de paella y sangría en Santiago. Typical Spanish dicen los jodíos. A ver...en Valencia segurísimo, pero en Galicia? "Paiela"?? Seguro??
Yo multaría a los que la ofrecen. Así, sin rodeos. Creo que ronda la publicidad engañosa.


- Deportes:

Santiago tiene un fallo. Y es que la mayoría de sus habitantes son del Celta. No sé porque concretamente el Celta y no el Porto o cualquier otro equipo portugués. Pero así son ellos.
No, en serio. La rivalidad de Santiago con A Coruña, ha hecho que los capitalinos prefieran al equipo del sur de Galicia (o norte de Portugal, jejeje) en lugar de al Dépor, aunque, con los años de auge de estos últimos, la cosa se ha ido igualando un tanto.

En Santiago no hay equipo en las categorías profesionales de fútbol, aunque hace un par de décadas el Compostela estaba nada más y nada menos que en primera división.
Es por ello que, en el momento actual, es una ciudad eminentemente baloncestística, gracias al gran papel que está haciendo el Obradoiro, luchando de forma habitual por entrar en los "playoff" de la liga ACB, y con una afición que hace de su cancha, el Fontes do Sar, una de las más calientes de España.



Amigos, Santiago es Galicia hecha ciudad. Y está tan al alcance de la mano, que muchas veces nos olvidamos de ella.
Reéncontremonos con nosotros mismos con un breve paseo por ella, o mejor aún, conozcámonos más caminando hacia ella, y disfrutando, como os decía, tanto el camino como la meta.



P.D. Véis porque decía lo de Drácula?? jajajaja

2 comentarios:

  1. Aquí una que estaría encantada de compartir las experiencias del Camino.

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    1. Cuando quieras y tengas tiempo, miro mi agenda y hacemos el Camino, Reyes. Me encantaria!!

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